2.7.08

El tubo celeste...

Cada línea de subterráneos de esta ciudad tiene algún rasgo particular. Pero sobre todo la A, con esas estaciones que parecen congeladas en la década del 20, y esos precarios y bamboleantes vagones, que lo hacen sentir a uno un poco como salido del tiempo. Y no sé si encontraré eco en otros subtenautas, pero a mi viajar en la línea A a veces me causa una sensación Cortazariana, como si la realidad que dejé en la superficie se transformara en otra cosa ahí abajo, que se siente -casi- igual, pero que en en el fondo es distinta. ¿Cómo puede ser -me pregunto siempre- que estén aún estas publicidades antíquisimas en las paredes? ¿Será un gesto de respeto al pasado? ¿O una especie de museo originalmente involuntario? Y si es así, ¿Porqué dejan que luzcan tan ajados los carteles, tan descoloridos los mosaicos? Preguntas, preguntas. Pero la A tiene un rasgo aún más misterioso, con el que no pueden competir ni la D con sus estaciones chetas, ni la B con sus trenes orientales que no quisieron desprenderse de sus carteles de advertencia en japonés, y ni siquiera la C con sus andenes plagados de sugestivos arabescos. La línea A esconde una estación abandonada. Mejor dicho, dos estaciones abandonadas, Pasco Sur y Alberti Norte; si uno está mirando distraídamente por la ventana (y es que no hay otra forma de mirar una ventana que da a un paredón negro) puede verse sorprendido por su aparición, tan fugaz como repentina. Incluso, si tiene suerte, podrá el atónito pasajero comprobar que las paredes conservan afiches y marquesinas, como testigos polvorientos de épocas mejores.



Lo aterrador es lo que sigue:
Se cuenta que un antiguo operario de la estación Sáenz Peña concurrió a los sanitarios en horas de servicio y encontró en ellos a un hombre degollado sobre un charco de sangre. De inmediato el atribulado empleado dio el alerta al personal de seguridad de la estación, quien acudió rápidamente a inspeccionar el lugar, encontrando el sitio en perfectas condiciones y sin ningún rastro de violencia. El veredicto fue unánime: se trataba de una alucinación.

Al día siguiente, volvió a repetirse la situación, aunque el protagonista fue esta vez otro empleado. Durante largo tiempo, muchos fueron los trabajadores que afirmaban haber visto al degollado en el baño de esa estación.

Otra historia de aparecidos tiene como escenario el tramo comprendido entre las estaciones Alberti y Pasco, aunque su figura central esta vez es una extraña mujer en traje de novia. Cuentan los dichos que se trata del fantasma de una joven a la que su prometido abandonó ante el altar, circunstancia por la cual la muchacha habría salido intempestivamente de la iglesia y se habría arrojado a las vías del tren. Otra versión, más romántica aún, señala que la ceremonia del casamiento se realizó pero al tratarse de una unión concertada por los padres de los novios, la muchacha prefirió suicidarse al salir de la iglesia antes de contrariar su propia voluntad. Otra historia cuenta que dos obreros italianos murieron en ese lugar durante la construcción de la línea en 1913, y hay gente que dice que hoy se pueden ver, con miradas tristes, sentados sobre los andenes abandonados de Pasco Sur y Alberti Norte...

4 comentarios:

gustaph dijo...

Muy impresionante el relato, Profesor B.! Lo voy a enviar a la cumbre de Viena para que se lo publiquen y Ud. gane mucho dinero y me pueda comprar muchas cosas!

Pero... yo viajo mucho en esa línea y nunca vi nada! Voy a prestar más atención! Muchos sitios afirman lo mismo que Ud.!

Lady Heather dijo...

Hace un tiempo, unos meses, estuve buscando informacion al respecto de estas leyendas urbanas de la linea A. Esta busqueda surgio a partir de una nota que dieron en telefe noticas o telenoche [No recuerdo exacatamente que noticiero fue] en el cual un periodista reocrria la linea y hablaba con un par de empleados tratando de desvelar los misterios. Por mas esta decir que fue una de esas notas que se dan para llenar espacio y que no develo nada. Pero en ella explicaban que las luces del subte se prendan y apagen en ciertos tramos del recorrido a travez de la existencia de espiritus [Personalmente no creo esto, pero dado el tema del post, era digno de acotar].

c h i n a dijo...

bueno... vivo en priomera junta, o sea a donde empieza-termina la linea A. la tomo una vez por semana si o si y en el ultimo horario de las 22.30 hs. voy de primera junta a Saenz Peña y de ahi a primera junta de nuevo. no voy a negar que me da cierto escalofrio o sensacion rara... pero obvio que voy a prestar mas atencion.
yo si creo en este tipo de cosas... he visto yo misma a este tipode gente-no gente y es verdad... existen.
besos!

Andrés Bonafina dijo...

voy a ir con mi sobrero de gaucho a tu casa a mirarte los pies a la medianoche...